La inteligencia artificial (IA) es una tecnología emergente de gran potencial. Mediante técnicas de Machine Learning, permite el análisis masivo de datos de forma autónoma para conseguir una toma de decisiones más rápida y diseñar soluciones nuevas y más eficaces para las sociedades y la economía. En la era de los datos, esta tecnología se ha convertido en la palanca clave de la competitividad industrial, creando ventajas competitivas y adquiriendo una dimensión geoestratégica para los países.