La Estrategia Nacional de Ciberseguridad de marzo de 2023 del presidente Biden establece una visión audaz y afirmativa para el ciberespacio. Describe un camino para lograr dos cambios significativos: la necesidad de que actores más capaces en el ciberespacio asuman una mayor responsabilidad por la ciberseguridad y la necesidad de aumentar los incentivos para realizar inversiones en resiliencia a largo plazo.
La Estrategia Nacional de Ciberseguridad de marzo de 2023 del presidente Biden establece una visión audaz y afirmativa para el ciberespacio. Describe un camino para lograr dos cambios significativos: la necesidad de que actores más capaces en el ciberespacio asuman una mayor responsabilidad por la ciberseguridad y la necesidad de aumentar los incentivos para realizar inversiones en resiliencia a largo plazo.
Lograr la visión de ciberseguridad del presidente requiere una acción coordinada entre el gobierno y la sociedad estadounidenses. El Plan de Implementación de la Estrategia Nacional de Ciberseguridad es una hoja de ruta para este esfuerzo. Si bien no pretende capturar todas las actividades de ciberseguridad que llevan a cabo las agencias, describe más de 65 iniciativas de alto impacto que requieren visibilidad ejecutiva y coordinación interinstitucional que el gobierno federal llevará a cabo para lograr los objetivos de la Estrategia. Cada iniciativa se asigna a una agencia responsable y está asociada con un cronograma para su finalización. Algunas de estas iniciativas ya están en marcha y se completarán a finales del año fiscal 2023. La Oficina del Director Cibernético Nacional trabajará con la Oficina de Gestión y Presupuesto para garantizar que las propuestas de financiamiento en la Solicitud de Presupuesto del Presidente estén alineadas con las actividades en el Plan de IMPLEMENTACION.
